“Para mi es Patria o Muerte”, me dice Evo en una entrevista telefónica que tuvimos en Junio del año  2020 durante la primera ola de pandemia y cuando todavía se encontraba exiliado en Argentina, “yo no quería salir de la casa grande del pueblo” – sede del órgano ejecutivo del estado Plurinacional de Bolivia -. Nuevamente el destino de Evo lo ponía un dilema político y vital. Los dilemas no tienen solución, son callejones sin salidas donde se debe tomar decisiones sin información o con muy poca prueba de éxito previo. Un dilema es un problema que exige una decisión.

El día viernes 8 de noviembre de 2019, la policía nacional de Bolivia, se había amotinado en Cochabamba, Sucre y Santa Cruz, y en La Paz estaban muy cerca de las manifestaciones opositoras al gobierno constitucional de Evo Morales. “Fue entonces que a pesar de mi intención de quedarme en la casa de gobierno, el vicepresidente y los ministros me aconsejaron retirarme ya que podía ser peligroso por ello nos fuimos a la residencia presidencial e intentamos resolver la situación”. Sin embargo a las 17 30 aproximadamente retornando  a la Casa grande del pueblo Evo se encontró con el edificio rodeado de civiles y decidió quedarse en la residencia y más tarde viajar el sábado hacia el Trópico de Cochabamba. Nada iba a ser fácil a partir de ese día. Previo a su partida desde al aeropuerto de La Paz le informaron que la policía intentaba tomar el aeropuerto, por lo cual habló con su custodia la cual le garantizó la seguridad para poder despegar hacia Cochabamba, llegaron sin inconvenientes y cuando bajó del avión un custodia de seguridad, un teniente lo llamó a solas le mostró mensajes y le adivirtió: “presidente están ofreciendo 50 mil dólares a quien lo entregue”. 

Retornó nuevamente a La Paz para continuar con sus reuniones y a la 0100 de la mañana del día domingo 10 de noviembre recibió una llamada del equipo del Secretario general de la Organización de Estados Americanos OAE, Luis Almagro, en donde le decían que ellos ya habían terminado el informe preliminar de la misión de observación electoral en Bolivia y que su conclusión era que había habido fraude “La Misión pudo constatar que varios de estos principios han sido vulnerados por distintas causas a lo largo de este proceso electoral”. Una gran mentira, confirmada entre otras cosas en las elecciones generales de Bolivia realizadas en el año 2020 donde el movimiento al socialismo MAS ganó por más del 50 % de los votos. Un golpe de estado desencadenado por ese informe y que iba a provocar un caos social, violencia y muertos. Por ello se le pidió al equipo de la OEA que suspenda la difusión, y que respete el compromiso previo de difundir el informe se el día martes 12. Sospechosamente, o como parte del plan golpista, fue adelantado el informe al día domingo a la madrugada. Evo intentó hablar con Luis Almagro, para solicitarle que suspenda el informe “sino lo suspende, usted va ser responsable de masacres en Bolivia y esto va ser su responsabilidad” Le advirtió. Sin embargo entre las 05 y 06 horas de la mañana el informe preliminar de la OEA era difundido. En esta situación y en un intento de pacificar y ordenar el país, Evo convocó a nuevas elecciones, pero su anuncio no conformó a la OEA ni a la oposición que desde hace tiempo tenía decidido resolver la situación por fuera del estado republicano y democrático y ejerciendo la violencia. Grupos golpistas atacaron las residencias de los funcionarios del gobierno elegidos democráticamente y muchas de ellas fueron quemadas.

El día 11 Evo vuelve a viajar a Cochabamba ya con la intención de ir al trópico de Chimoré y refugiarse de un posible atentado cuyo premio mayor eran 50000 dólares. La aeronave presidencial aterrizó en Cochabamba y al llegar al aeropuerto, el piloto decidió no dirigirse  a la plataforma que usualmente se utiliza para los viajes presidenciales, estaba intentando estacionar en otra plataforma llena de militares. “Veo que el piloto me lleva a una plataforma que está llena de militares fuertemente armados y me di cuenta que era una trampa, por ello me dirigí a la cabina del avión y le pregunté primero el porqué del cambio a lo cual me respondieron que era por mi seguridad. ¡De ninguna manera! Le dije y le ordené volver a la plataforma donde miles de compañeras y compañeros me estaban esperando”. El pueblo fue su custodia.

A partir de ahí Evo se refugió  “selva adentro” en la zona cocalera en el lugar desde donde comenzó su carrera política como líder sindical, a rodearse y cuidarse con los suyos, no fue fácil, “Se paseaban camionetas fuertemente armadas y seguía la recompensa de 50000 dólares” me repite Evo.

Desde allí con su pueblo, el pueblo latinoamericano, presidentes y personalidades destacadas de distintos países se comenzó a planear el vuelo que salvaría su vida. El presidente Alberto Fernández de Argentina, Miguel Diaz Carnel de Cuba, Andrés Lopez Obrador de México, Nicolás Maduro de Venezuela, expresidentes como José Luis Zapatero y Ernesto Samper, el premio nobel de la Paz Rigoberta Menchu, Cancilleres de diferentes países del mundo, y fundamentalmente un pueblo que no lo abandonó formaron un solido bloque de denuncias y reclamos para que no se llegue a un magnicidio “si no hubiera esta presión internacional no sé qué hubiera sido de mi situación personal”. Luego de muchas negociaciones y un ofrecimiento de exilio por parte de México comenzó la operación aérea de rescate.

Un viaje por la política Latinoamericana

El lunes 11 de Noviembre de 2019, la aeronave Gulfstream G550 de la Fuerza Aérea Mexicana, despegó  de México con destino al aeropuerto de Lima Perú, con la aceptación del exilio de Evo en México por parte militares los militares bolivianos (Bolivia estaba en manos de sus Fuerzas Armadas). El plan de vuelo previsto fue una escala en Lima Perú, con la intención de reabastecerse de combustible y esperar allí las autorizaciones para continuar a Cochabamba, Bolivia, donde se encontraba el presidente Evo Morales.

Aterrizado en el aeropuerto Jorge Chávez de Lima, aproximadamente a las 11 horas, comienzan los problemas y dificultades para rescatar a Evo Morales. La aeronave Mexicana, luego de reabastecerse despegó hacia Cochabamba, y al llegar al espacio aéreo boliviano, no obstante haber obtenido un permiso de sobrevuelo, se le negó el acceso.

– Oiga pero ya estoy aquí en vuelo. Le reclamó el piloto de la FAM (Fuerza Aérea Mexicana) 3916

– Sí, pero no, no puede pasar al espacio aéreo. Respondió el control aéreo Boliviano.

La aeronave tuvo que regresar a Lima y esperar nuevas autorizaciones. Evo relata que fue entonces cuando llamó al General Jorge Terceros Comandante de la Fuerza Aérea Boliviana, actualmente detenido en el marco de la investigación por presunta participación en el golpe de estado a Bolivia, acusado de terrorismo, sedición y organización criminal y hoy involucrado en la denuncia por el envío de armas desde Argentina. Evo de reclamó que deje entrar al avión Mexicano, “.. me respondió que ninguna avión militar puede entrar a Bolivia, hermano general le dije: acá en Chimoré entraron numerosos aviones de EEUU y hace un mes llegó una comisión militar de Turquía para ofrecernos aviones militares, no me venga a decir que un avión militar no puede entrar a Bolivia”. El hoy aeropuerto de Chimoré había sido base de la agencia antidrogas de los Estados Unidos (DEA) y numerosos aviones y helicópteros de EEUU entraban y salían desde allí. A partir del año 2006, el presidente Evo Morales decidió convertirlo en el actual aeropuerto civil internacional inaugurado en 2015. “Ningún gringo volverá a controlar el lugar” afirmó Evo en el acto público”.

Volviendo al relato de la conversación con el Jefe de la Fuerza Aérea Boliviana, este le aconsejó que se contratara un avión particular, y le comunicó que desde EEUU le ofrecen un avión. “Que está insinuando General, desde EEUU nos ofrecen una avión…” respondió el presidente, era una nueva trampa cuyo destino, en palabras de Evo hubiera sido Guantanamo o una prisión de los EEUU.

Entre tanto en Lima Perú se Vivian horas decisivas y la operación pudo fracasar. Complicaciones con la carga de combustible y luego con el pago del mismo, el cual se exigió que sea en efectivo situación extremadamente inusual, más la demora del permiso de ingreso a Bolivia, retrasaban la operación. Finalmente el mando de la fuerza aérea boliviana, terminó por otorgar el permiso de sobrevuelo.  Llegó por fin el avión a Cochabamba, “allí subimos y comenzó una larga espera”. Hubo un primer intento de despegue y cuando estábamos en la cabecera de pista el gobierno de Perú suspendió el permiso otorgado para que la aeronave Mexicana sobrevuele su espacio aéreo. La justificación fue “valoraciones políticas”.

– Pendiente para autorización, Fuerza Aérea Mexicana 3916, solicitó el comandante, a lo que la torre de control le respondió que estaban esperando la autorización de Lima y que hasta el momento no está autorizando  el ingreso al estado aéreo peruano …Luego el controlador aéreo le sugirió: Comandante no hay posibilidad de primero irse a La Paz para apresurar el despegue? Que significaba ese nuevo ofrecimiento. Volver a La Paz cuando el país y la casa grande del pueblo estaba tomada por los golpistas, sin duda era una nueva trampa.

La espera en Chimoré fue muy tensa, por un lado militares custodiaban el interior del aeropuerto y miles de compañeras y compañeros en el exterior del aeropuerto, hacían de escudo humano para salvar a Evo. Gracias al presidente electo Alberto Fernández se logró un plan alternativo. Fernández habló con el presidente de Paraguay, Mario Abdo, para pedirle que dejara volar el avión mexicano con Morales hasta Asunción y ahí poder recargar combustible, el permiso fue otorgado.

La aeronave Mexicana nuevamente carreteó hasta la cabecera de pista del aeropuerto de Chimoré y solicitó permiso para el despegue, el avión no despegaba estuvo 30 minutos y regresó, el comandante le dijo a Evo y sus pasajeros “No salgan del avión esto es territorio mexicano”. El pueblo en Chimoré se estaba desconcentrando suponiendo que el avión despegaría, sin embargo al ver que no sucedía y que el avión regresaba el pueblo regresó, más de 10000 compañeras y compañeros, solo faltaba una chispa para encender la violencia y represión. Fue ahí cuando Álvaro Lineras, llamó al General Terceros y le dijo: General usted no nos está dando permiso de salida pero sepa que aquí hay concentrados más de 10000 compañeras y compañeros aquí va arder el aeropuerto, seguramente vamos a arder también nosotros y van arder también sus militares, si pasa algo va a ser bajo su responsabilidad.  El General entonces le pidió a Álvaro que le pase con los pilotos y allí les dio el permiso de salida, a las 2330 el avión despegó rumbo a Paraguay y hacia el exilio de Evo Morales.

Abastecida la aeronave en Paraguay y a punto de despegar, se le comunicó a México que, con Evo a bordo, ya no podrían sobrevolar el espacio aéreo Boliviano, todo se volvía a complicar. El embajador de Brasil en La Paz se ofreció entonces a ayudar y se consiguió, “casi milagrosamente”, según el canciller Mexicano Marcelo Ebrard, un permiso para despegar de Paraguay y volar en la línea fronteriza entre Bolivia y Brasil, hasta poder cruzar el espacio aéreo de Perú y con el permiso autorizado por Ecuador el cual incluía una  recarga de combustible en caso de necesidad la aeronave saldría al Pacífico con destino a México. Al filo de la madrugada, despegaba desde Asunción el avión con Evo Morales. El vuelo tuvo que ser milimétrico, por la frontera entre Brasil y Bolivia, se cruzó Perú y próximo al llegar a Ecuador, se le negó el permiso de sobrevuelo y reabastecimiento. Por lo cual la aeronave  tuvo que rodear los límites de espacios aéreos entre Perú y Ecuador y entrar en aguas internacionales. Pasadas las 11 de la mañana del día 12 de Noviembre, Evo Morales aterrizó como asilado político en México.

Sobre el final de la entrevista Evo me expresa que la situación de países que autorizaban el sobrevuelo de sus territorios y luego se le negaban pasar, le hace confirmar que EEUU intervenía para cancelar los sobrevuelos y lo relaciona con el vuelo de retorno de Rusia en  Julio del 2013 cuando estuvo 13 horas varado en Viena Austria, donde tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia, debido a que varios países como Francia, Italia y Portugal le negaron las autorizaciones de sobrevuelo y escalas técnicas y finalmente España le permitió realizar una escala en Canarias. La excusa fue que Edward Snowden ex empleado de la agencia de inteligencia estadounidense CIA, viajaba a bordo del avión presidencial Boliviano. “En mi vuelo del exilio nuevamente  por instrucción de Estados Unidos no me dejaban aterrizar en territorio Peruano, ni Ecuatoriano. Si no daban permiso los Brasileros que hubiera sido difícil poder salir de Bolivia…y cuando Alberto Fernandez asumió la presidencia de Argentina, y me ofreció asilo. EEUU nuevamente presionó para que no salga de México, no querían mi exilio en argentina y menos cerca de la frontera con Bolivia, donde yo quería ir para poder reunirme con mi gente. El objetivo de EEUU era que no salga el avión, que no haya exilio, si eso sucedía, dos cosas hubieran pasado: como en Chile con Salvador Allende  o la prisión en EEUU…Dos llamadas salvaron mi vida, las dos llamadas al General Terceros, una para que aterrice el avión Mexicano en Cochabamba y la llamada de Álvaro Lineras previa al despegue”. Le pregunto porque le permitió el General Terceros despegar y Evo me contesta, “por miedo al pueblo. En Chimoré 10000 compañeras y compañeros concentrados los hubieran dominado. Me salvó el pueblo concentrado en Chimoré”.

Evo citó al dudoso suicidio de Salvador Allende en 1973 en Chile, pudo haber nombrado el suicidio de Gertulio Vargas en Brasil 1954 o el exilio de Jacobo Arbenz en 1954 en Guatemala. La lista continúa en el nuevo siglo: Fernando Lugo en Paraguay, el impeachment a Dilma Rousseff en Brasil, persecuciones judiciales a Lula Da Silva y Cristina Fernandez de Kirchner, espionajes ilegales, lawfare, etc. El exilio, los suicidios sospechosos y prisiones ilegales fueron el destino de muchos políticos que intentaros participar e incluir a todas las clases sociales en la vida económica y política de sus países. En argentina el presidente Juan Domingo Perón, destituido por un golpe militar en 1955, tuvo que esperar casi 18 años para volver a su país, la resistencia cuyo emblema fue “Perón vuelve” había inventado el mito que un día sobre los cielos argentinos un avión negro traería al General. Evo luego de 3 intentos de golpes de estado y un cuarto que tuvo éxito en 2019, decidió sobre el dilema “Patria o muerte” su callejón sin salida. Se retiró al exilio en un avión blanco y resistió con su pueblo. Evo cambio la “o” y la “muerte” y a menos de un año de ese hecho y a través de un proceso democrático, tiene “Patria y Vida” tal como lo prometió. Salí de Chimoré para salvar la vida y volveré a Chimoré gracias a la vida del pueblo”.




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